Ditobanx: El neobanco para los no bancarizados
Ditobanx, es una de las primeras FINTECH en El Salvador especializada en brindar servicios Bitcoin. Cuando el presidente Bukele anunció en la Bitcoin Conference del año 2021 que El Salvador se convertiría en el primer país en tener al Bitcoin como moneda de curso legal, Ditobanx ya venía dando sus primeros pasos como proveedor de servicios de activos virtuales.
Un enfoque pionero en servicios Bitcoin
Desde su creación, Ditobanx ha buscado marcar la diferencia en el sector financiero salvadoreño al especializarse en servicios Bitcoin. Esta apuesta innovadora ha llamado la atención de los inversionistas bitcoiners, quienes reconocen el potencial disruptivo de esta tecnología financiera emergente. Con una visión clara de los beneficios y oportunidades que brinda Bitcoin, Ditobanx se ha posicionado como un líder en la adopción de esta criptomoneda en El Salvador.
RONDAS DE INVERSIÓN
La confianza depositada en Ditobanx por parte de los inversionistas bitcoiners ha sido fundamental para el rápido crecimiento y desarrollo de la startup.
Guillermo Contreras, CEO de Ditobanx, destaca que la presentación de la idea de negocio ante este grupo de inversionistas resultó en un levantamiento de fondos de inversión por medio millón de dólares y una valoración de mercado superior a los cuatro millones. Este capital semilla ha permitido a Ditobanx expandir sus operaciones y llevar sus servicios Bitcoin a un público más amplio en El Salvador.
REGULADOS POR LA SUPERINTENDENCIA DE BANCOS
Ditobanx es una entidad supervisada por la Superintendencia de bancos de El Salvador lo que les otorga todos los privilegios para efectuar todo tipo de operaciones con activos digitales y tradicionales excepto la captación de fondos del público. Cuentan además con licencia como proveedores de servicios Bitcoin y Proveedores de Servicios de Activos Virtuales. El contar con tres licencias les da un elemento diferenciador frente a otras plataformas del mercado salvadoreño.
Contreras define a Ditobanx como “un neobanco para los no bancarizados”.
OFERTA DE SERVICIOS
Actualmente su principal servicio es el procesamiento de pago a las empresas en el cual permiten a los comercios recibir pagos en Bitcoin que automáticamente son convertidos a dólares, pero además la posibilidad de aceptar pagos con tarjetas Visa y Mastercard. Para ellos cuentan con terminales físicas, terminales virtuales y link de pagos. Esto según palabras de Guillermo Contreras lo denominan una pasarela de pagos Full Service.
El nicho de mercado al que están llegando actualmente son los comercios del sector turismo donde se ha desarrollado de manera más rápido la adopción del Bitcoin. Actualmente cuentan con alrededor de 400 comercios afiliados.
Wallet digital con tarjeta prepagada de Mastercard.
Aunque ya ofrecen el servicio de Dito Wallet hace algún tiempo, en los próximos meses estarán integrando dentro del marco de Crypto Card program una tarjeta prepagada, vinculada a la billetera. Inicialmente este servicio estará disponible para “Friends and Family” y paulatinamente se ira ofreciendo a todos los usuarios de la plataforma.
Un tercer servicio es los prestamos colaterizados con Bitcoin pero que aun no es un producto muy desarrollado por las bajas cantidades de criptomonedas que posee la población salvadoreña.
Esperan en el corto plazo poder ofrecer prestamos tradicionales a los usuarios con la data obtenida de las actividades que realizan actualmente.
PLANES DE EXPANSIÓN
Dentro de sus planes de expansión de corto plazo esta el abrir operaciones en Colombia y Mexico. Además, han firmado recientemente una alianza con una empresa canadiense que les permitirá ofrecer servicios a salvadoreños residentes en Canada.
Para finalizar
Guillermo Contreras nos menciona que hay desafíos importantes sobre todo en el tema de la convertibilidad a dólares e importantes retos en el tema de la adopción pero que ellos ven un enorme potencial de crecimiento en El Salvador sobre todo por las nuevas leyes para la promoción de la inversión tecnológica que han sido aprobadas.
Escrito por Carlos Romero Rizo
